Los brain breaks o pausas activas son pequeños descansos en los que cambiar de actividad permite a los estudiantes relajarse, oxigenar la mente y cargar las pilas para volver a concentrarse en la clase. Este tipo de descansos presentan múltiples ventajas y hay varias maneras de aplicarlos. ¿Quieres descubrir más sobre esta herramienta para aumentar el rendimiento de tus estudiantes?
Definición de brain break en educación
Nuestro cerebro es un órgano formidable. Nos permite realizar operaciones muy complejas, pero que consumen mucha energía, por lo que necesita descansar y desconectar de vez en cuando. En el caso de los niños, este fenómeno se acentúa aún más tras intensos periodos de concentración. Ahí es donde entran en juego los brain breaks o descansos mentales.
Se aconseja que los niños hagan brain breaks o pausas de unos 3-5 minutos por cada 15-20 minutos de trabajo. Este tiempo permite a los alumnos relajarse, oxigenar su cerebro y recargar pilas para volver a atender en el aula y poner la mente a trabajar. Gracias a estas pausas, se evita la desconcentración y la desmotivación, y además permiten mejorar la atención y el rendimiento de los estudiantes.
Hay varios tipos de descansos, aunque principalmente están los que consisten en realizar otra actividad educativa, un juego, cantar una canción, etc. y los descansos que incluyen actividades físicas, a menudo denominados pausas activas. Cada vez hay más centros educativos que aprovechan estas pausas para incorporar la actividad física en la vida diaria de los estudiantes y fomentar el ejercicio físico. En este sentido, el Sistema Nacional de Salud en España ha desarrollado la Estrategia de Promoción de la Salud y Prevención (EPSP).
Las actividades desarrolladas durante este tiempo de descanso pueden estar relacionadas con la temática de la clase o no. Por ejemplo, en la clase de matemáticas, se puede hacer una pausa activa en la que los estudiantes se levanten de la silla y hagan estiramientos mientras cuentan de cinco en cinco.
El mejor momento para hacer brain breaks y juegos en el aula
Teniendo esto en cuenta, ¿cuál es el momento más adecuado para hacer estos descansos? Lo más recomendable es aprovechar antes de que el estudiante se desconcentre totalmente y pierda el interés en la clase, lo que podría llevar a una desconexión total durante el resto de la lección. Por ejemplo, en primaria lo ideal es realizar tres descansos mentales en cada clase de 45-50 minutos. Sin embargo, el docente debe ser flexible, estar pendiente de las necesidades de los estudiantes en cada momento y saber adaptarse a ellas.
En cursos más avanzados, se recomienda hacer menos descansos, aunque tal vez un poco más largos, de 6-8 minutos. Por ejemplo, en secundaria, un descanso de 8-10 minutos por cada clase de 45-50 minutos es más que suficiente.
Ventajas de las pausas activas para los estudiantes
Los descansos mentales presentan múltiples ventajas y es importante que los docentes las conozcan. Al utilizar brain breaks los beneficios principales son los siguientes:
- Mejoran el rendimiento
Estos descansos, sobre todo cuando incluyen actividades físicas, estimulan las neuronas, mejorando la función cognitiva y por consiguiente la motivación y el rendimiento de los estudiantes. Por supuesto, los beneficios varían en función del tipo de actividad desarrollada, pero cualquier tipo de brain break da tiempo a los alumnos a asimilar los contenidos.
- Mejoran la concentración
Los descansos mentales son aún más valiosos en las etapas tempranas de la educación, cuando los estudiantes tienen más dificultades para concentrarse. El dinamismo que proporcionan estas pausas, les ayuda a aumentar el tiempo de dedicación a una misma tarea. Esto hará que en el próximo periodo de concentración, los estudiantes estén más relajados y tengan más energía para prestar atención a la lección.
- Mejoran el estado emocional de los estudiantes
Hay actividades como la música, el baile, un juego o el movimiento, que relajan a los estudiantes. Les hacen sentirse en un contexto menos académico, les divierte y refuerza su motivación en el aula. Todo esto les hace adoptar una mejor actitud para fijar conocimientos y les brinda una excelente experiencia de aprendizaje.
- Fomentan una mejor forma física
Actualmente, el sedentarismo es un problema en la sociedad. Y este fenómeno también afecta a los más pequeños. El sedentarismo tiene consecuencias nefastas para nuestra salud, como por ejemplo la obesidad. Aprovechar los descansos mentales para practicar ejercicio físico en el aula tiene un impacto muy positivo en la salud de los alumnos. Además, con ello, pueden incorporar el hábito de levantarse y moverse tras largos periodos sentados, incluso cuando estudian en casa.
- Reducen el estrés y crean un ambiente distendido
Los descansos activos crean momentos distendidos, en los que los estudiantes pueden relajarse y sentir que juegan con sus compañeros. El docente puede aprovechar estos juegos para reforzar la complicidad con los estudiantes. Es buena idea incluirles y dejarles proponer actividades para los descansos.
Tipos y ejemplos de brain breaks en el aula
En caso de que decidas empezar a utilizar las pausas activas, necesitarás ejemplos de actividades que puedes plantear a tus estudiantes. Aquí te dejamos algunos de los mejores brain breaks y ejemplos:
- Juegos por equipos
Una excelente idea que tiene muy buena acogida entre los estudiantes son los juegos brain break, un formato dinámico y divertido para el aula. Por ejemplo, utilizar tu pantalla interactiva ActivPanel de Promethean para jugar a palabras encadenadas, Simón dice, al Veo veo, el ahorcado o resolver sopas de letras o crucigramas por equipos. Combinar el formato juego con el trabajo en equipo da muy buenos resultados, fomenta la colaboración entre los estudiantes y el hecho de competir con otros equipos les motiva y les hace sentir que están jugando.
- Actividades físicas
En este caso, se propone realizar actividades físicas como estiramientos en el sitio, correr despacio alrededor del aula, imitar los movimientos del profesor o de un compañero, etc. El ejercicio físico tiene la ventaja de contribuir a la oxigenación del cuerpo. Además, hay estudiantes a los que les resulta más fácil fijar conocimientos al relacionarlos con el movimiento, es lo que se conoce como el estilo de aprendizaje cinestésico y fomentar este tipo de actividades puede ser muy útil para estos alumnos.
- Gimnasia mental individual
Este tipo de ejercicio que mejorará la agilidad mental de los estudiantes al tiempo que les permite desconectar del contenido de la clase. Un excelente ejemplo es el cálculo mental en clase de matemáticas. Tal vez el profesor está explicando fracciones y puede aprovechar un descanso mental para colocar a los alumnos de pie alrededor del aula e ir pidiéndoles que resuelvan cálculos mentales sencillos (sumas y restas). Al igual que este ejercicio, hay otros muchos que se pueden utilizar en los brain breaks.
- Ejercicios de relajación o meditación
No es necesario que los brain breaks comporten siempre un subidón de adrenalina y actividad. Es buena idea combinar pausas de mucha actividad con pausas más tranquilas, sobre todo al final del día. Hacer ejercicios de yoga en el sitio o guiarles en una meditación de 5-6 minutos puede tener resultados muy positivos en la vida de los estudiantes.
- Actividades creativas
Otro tipo de actividades muy útil para que los estudiantes desconectan son los juegos de rol, o actividades creativas como bailar o cantar. Por ejemplo, una canción en clase de lengua extranjera puede servirles para descansar al tiempo que cantan y bailan todos juntos. Otras propuestas pueden ser pedirles a los estudiantes que interpreten un papel, o utilizar ejercicios de calentamiento de teatro, como ejercicios de voz, mímica, relajación muscular, imitar animales, etc.
Por último, puede ser buena idea crear una ruleta de brain breaks, con distintos tipos de actividades en ella. Puedes pedir a un alumno que haga girar la ruleta para saber qué ejercicio será el elegido para ese descanso. También puedes pedir a tus estudiantes que propongan actividades o incluso que sean ellos quienes coordinen algunos descansos. Eso les hará ser más autónomos y también les ayudará a sentirse incluidos y escuchados en el aula.
Con todas estas ideas de brain breaks, ahora podrás ayudar a tus estudiantes a mantener la concentración y a rendir más en el aula. Ten en cuenta que no todas estas ideas funcionan bien en todos los grupos, ya que cada estudiante es diferente y tendrás que encontrar la combinación de actividades que mejor se adapte a tus estudiantes en concreto.
Si buscas más ideas o información al respecto, la universidad de Castilla la Mancha ha elaborado un documento con fichas de actividades y propuestas para implementar las pausas activas físicas en educación infantil y primaria.
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